dilluns, 30 d’agost del 2021

diumenge, 29 d’agost del 2021

dissabte, 28 d’agost del 2021

dijous, 26 d’agost del 2021

 








Nueva colaboración con Xurxo Vázquez :-)
Si hace un par de semanas el guion fue mío y el dibujo suyo, 
ahora he dibujado yo a partir de su guion. En colaboraciones así 
se aprende mucho, no solo técnicamente, porque es posible 
comprender mejor la mirada de otro dibujante.

Ya dije la otra vez que admiro a Xurxo: de primeras su dibujo recuerda 
a Quino, por la alta definición y también la alta sencillez en el trazo (es
 diáfano como la mirada de un niño, y no esconde la experiencia y las
 frustraciones de un adulto), y la manera en que los personajes se
 muestran al público me llevan también a las tiras de Johnny Hart, 
un maestro en exponer sin marcos ni embalajes las contradicciones 
de eso que llamamos civilización, en especial la occidental. 
Y también diría que en Xurxo veo algo de Will Eisner, por la 
melancolía y desesperación latente en sus guiones.

Y podría seguir enlazando referencias con leyendas del cómic y 
del humor gráfico, pero prefiero mencionar alguna de las muchas 
viñetas de Xurxo: La primera que me viene a la cabeza es aquella 
donde un personaje escala una inmensa piel de plátano que alguien 
tiró en la calle, y no hay nada más, porque no hace falta nada más 
cuando el dibujo es, por sí solo, un verso libre. Y digo verso porque
 muchas de sus tiras cómicas evocan poéticamente realidades difíciles 
de digerir, como esa en la que Alguien te da una manzana, tú la 
muerdes y enseguida eres reprendido, porque Alguien lo que quiere 
es que te pongas la manzana en la cabeza para practicar el tiro con arco.
 Insisto: poesía, y poesía visual de la buena es ese personaje con cara 
de aburrido y resignado que dice “Yo soy de la opinión”, y la frase es 
en realidad otro personaje que lo sujeta con una cuerda y un collar.

Y sí, sus viñetas no son cómodas para un público autocomplaciente 
y perezoso, quizá por eso, pese a su fecunda imaginación y su dibujo
 tierno y simpático, no es muy conocido por el gran público. Pero la 
gente que conocemos su obra sabemos que Xurxo logra eso tan difícil 
de lograr: él invita a pensar, a sonreír y también a reír.

Y esos tres verbos son, por cierto, amigos íntimos del verbo liberar :-)














dimecres, 25 d’agost del 2021






 




Lo suyo no es una relación tóxica, es una relación tósica. 
Qué se le va a hacer, si en lugar de decirse Te quiero se tosen y 
se estornudan y hasta se esputan en medio de una felación. 
Es bueno saber que cada pareja es un mundo: hay parejas que 
todo lo hacen rápido, con prisas, y siempre van de culo. Esta pareja, 
en cambio, se toma la vida con calma, todo lo hacen moco a moco.
 




(“Remake” de una viñeta que me tosió hace un lustro, y que he vuelto 
a hacer y publicar porque, seamos sinceros, me ha entrado la tos)












dilluns, 23 d’agost del 2021





 



Un encàrrec personalitzat que em va fer Roser Algué, i que vaig gaudir molt de 
principi a fi. Ja veieu que és una camiseta estampada per davant i per darrere.









I gira al voltant d'uns versos d'ella. Content de fer-la, i més quan em va
 dir que li havia agradat molt i em va enviar les fotos que ara compartisc ací.

I podria parlar ara de les camisetes i tasses que faig, però preferisc
 parlar de la Roser, a qui vaig conéixer fa molts anys gràcies al seu blog
 Petiteses, allà hi ha molts poemes i altres textos seus, vos el recomane.
 A més a més Roser Algué té publicats tres llibres: "Sota un vel de
 cendra", un cant de nostàlgia nascut després dels incendis que van
 arrasar la Catalunya central en 1998. Segons paraules de l'autora és 
"un voler donar a conéixer una forma de vida que molta gent ignora i
 que, malgrat la seva duresa, també tenia les seves compensacions,
 sobretot pel que fa a relacions humanes". El primer llibre de poemes de
 la Roser és "Petiteses", i en ell reivindica la importància de les coses
 petites: "Jo crec que hem de viure observant tot el que ens envolta,
 sense perdre detall del que passa al nostre entorn, que ens va enriquint 
i això ens permet transmetre als altres un borrall de sensibilitat". I el
 darrer llibre fins ara és "Jo et donaré ales", on la Roser ens mostra una
 relació epistolar amb una persona que viu (i de vegades mor) a la presó.
 També ha publicat un conte infantil: "La Kika no s'agrada", que tracta el
 tema de l'autoestima. Roser diu: "vaig triar aquest tema perquè en
 la meva experiència com a mestra, sovint he trobat infants que no
 s'accepten tal com són i d'alguna manera volia fer-los arribar 
que l'important és ser bonics per dintre. Com siguem 
per fora és molt relatiu".


I ací vos deixe un poema seu que m'agrada molt:

"Quan surto de casa,
veig al cel un núvol
que sembla un trapella.
Si ell em veu s'amaga.
Si me'n vaig em crida.
I com que m'enfado,
em diu: -Feia broma!
I em pica l'ullet".



Gràcies, Roser, per tanta poesia, per tanta bondat i per confiar en mi :-)







dissabte, 21 d’agost del 2021





 



Viñeta sin más vestidos, sin más fanáticos y sin más inquesidores 
(un inquesidor es un represor, o represora, del queso). Así pues, no
 entraremos a hablar de los odios ni tampoco de los prejuicios que
 gustan, tanto en Oriente como en Occidente, de impedirle a la 
gente que disfrute de sus placeres, de sus fantasías y 
de sus pocas o muchas alegrías.

Solo añadiré algunas palabras de una canción que oí una mañana 
en un sueño que alguien (no diré quién) tuvo: “Dicen que hoy no hace
 falta, mas turbante yo deseo. Dicen que hoy hace frío en el desierto, y
 que el sol se halla escondido, sí, lo sé, mas turbante yo deseo. Dicen
 que con una gorrita o un sombrero ligero o acaso un pañuelito ya 
es suficiente, mas turbante yo deseo”. Luego venía un solo de 
guitarra, o de acordeón, no recuerdo bien el sueño aquel que 
una mañana alguien soñó. Así pues, esto es todo por hoy.
 






(La viñeta es “remake” de la versión original que soñé hace 
unos ocho años, menos o más)





dijous, 19 d’agost del 2021

 







Hi ha gent que fa coses molt rares (coses molt rares i molt necessàries, tot s'ha de dir).








("remake" d'una vinyeta de fa cinc anys)








dimecres, 18 d’agost del 2021





 



―Hola, Cactus.

―Adiós, mi fiel escudero Ximo. Yo me voy ya.

―¿Adónde va vuestra merced?

―A buscar al memo ese. Y cuando lo halle… ¡Ay, cuando lo halle! 
¡Ni las puertas del infierno capaces serán de detenerme, tal 
es mi osadía, mi empeño y mi chotis!

―Uy, me temo lo peor. Pero dígame, buen caballero andante: 
si lo encuentra usted, no le hará daño, ¿verdad?

―¡Ximo! ¿Por quién me has tomateado? ¡Yo soy un cactus, no 
un camellero odiante! ¡Y los cactus somos seres muy puacíficos!

―Si es así, me quedo más tranquilo. Vaya, vaya pues a hacer lo 
que sea menester, don Cactus de la santa Púa.

―Voy, voy yo me a mí mismo me voy, sí.

­―Muy bien, ¿pero no se despide vuestra merced de nuestro querido 
y bello público? Mire que no son algoritmos lo que hay ahí delante, 
son personas, con su corazoncito y sus cositas.

―¡Oh, sí! ¡Olvidábame yo de despedirme como es debídome! 
¡Enmendaré mi horror ya mismo! ¡Hasta pronto, querido vello púbico! 
¡A cuidarse, a gozarse y a correrse grandes aventuras por Castilla y 
por La Mancha y por Nueva Gales del Sur! ¡Porque anchoa es 
Castilla pero la mejor paella es la valenciana del norte, 
o sea, la de la Plana de Castelló!

―Mucho se está liando vuestra merced con la despedida, parecióme a mí.

­―¡Parecióme a mi también, mi fiel Ximo! ¡Así pues, voy yo me 
a mí mismo cabalgando por los desiertos inconmensurables del 
destino y del desatino! ¡Y que no vea yo ni un burka en mi camino,
 tapando vuestras vergüenzas y vuestras desvergüenzas! ¡Porque si
 acaso yo lo veo, desfaceré el entuerto y jugaremos al veo veo!

―Hasta luego, Don Cactus de la Chanza, buen viaje :-)

―¡Hasta luegooooo!













dimarts, 17 d’agost del 2021






 





Hi ha un rellotge al desert
Que ni mira ni escolta ni canta ni riu
I t’ofega el cor i em buida les flors
 
I si el rellotge és un miratge
No li fem cas i explorem les coves
I plorem muntanyes
 
I sí, el rellotge és un miratge
I algú perd la fe en les voltes perdudes
Refresca la gola i fa un niu en un instant











dissabte, 14 d’agost del 2021






 





“―Ahora y aquí, muchachos ―repitió el pájaro una vez más, y bajó
 aleteando de su percha en el árbol muerto y se posó en el hombro 
de la niña. Esta peló otra banana, entregó dos tercios a Will y 
ofreció el resto al mynah.

―¿El pájaro es tuyo? ―preguntó Will.

Ella meneó la cabeza.

―Los mynah son como la luz eléctrica ―declaró―. No pertenecen a nadie.

―¿Por qué dice esas cosas?

―Porque alguien se las enseñó ―respondió la chiquilla con
 paciencia. ¡Qué burro!, parecía insinuar su tono.

―¿Pero por qué le enseñan esas cosas? ¿Por qué “Atención”? 
¿Por qué “Ahora y aquí”?

―Bien… ―Buscó las palabras correctas para explicar lo evidente a 
ese extraño imbécil. ― Eso es lo que uno siempre olvida, ¿no es así?
 Quiero decir, uno se olvida de prestar atención a lo que sucede. 
Y eso equivale a no estar ahora y aquí.

―Y los mynah vuelan de un lado a otro recordándolo… ¿es eso?

La niña asintió. Por supuesto, era eso. Hubo un silencio.”



Fragmento de “La isla”, novela de Aldous Huxley publicada en 1962.
Traducción de Floreal Mazía para la edición en Edhasa de 1986.


 

La viñeta es “remake” de un ahora que hice dos años largos atrás. 
¿Y por qué volver a hacer un ahora que ya es pasado? Pues porque 
volver a hacer no siempre significa repetir, al menos en este caso 
hay algunas cosas diferentes, ya no en el texto pero sí en el dibujo. 
Y no añadiré nada más. ¿Por qué? Porque colorín colorado… 
este ahora ya se ha terminado.










dijous, 12 d’agost del 2021






 




Las células cancerígenas no son aliens que llegan de fuera y se dedican 
a destruirnos. Sí, se dedican a destruirnos pero son células nuestras que,
 por unas causas o por otras, a partir de un determinado momento
 mutan y siguen solo la ruta de su propia juerga, sin tener ya 
en cuenta el bien de nuestro organismo.

Así también en las sociedades humanas, surgen bichos que 
no miran por el conjunto de la sociedad, hacen para sí solamente, 
para su propio gusto (o para su propio disgusto, que de todo hay),
 bicharracos que consideran lícito apropiarse de cuanto más mejor, miles
 y millones para el engorde de su ego trastornado, sin importar lo que eso
 supone para el resto de la comunidad. Grandes ejecutivos de bancos o de
 corporaciones que amasan fortunas, grandes estrellas del deporte o del
 espectáculo o del comercio acumulando bienes que generan (aunque 
no lo reconozcan ni ellos ni sus fans) males y miserias a su alrededor. 
Así con las compañías eléctricas, también. Controladas por 
células cancerígenas acaban convertidas en 
grandes compañías cancerígenas.

Y no hay quimioterapia ni radioterapia ni medicamento ninguno 
contra esos patógenos, cómo lo va a haber, si la propia industria del
 medicamento está empecinada en el enriquecimiento de unos 
pocos, a costa del sufrimiento de unos muchos.

Y podemos creernos la mentira: que el mundo es así y así seguirá, 
que es legítimo acumular tanto poder y riqueza en unas pocas garras, 
que ese es el orden de las cosas… No, no es el orden, ni natural ni
 artificial, eso es el desorden, es la enfermedad. Lo que nos venden 
noche y día en los grandes altares mediáticos no es el sistema: es el
 antisistema, es la antihumanidad, es la antisociedad que nos corroe.

Y habrá, seguro, quien dirá que somos la gente que pensamos así la
 peligrosa, que nosotras somos el patógeno, el ente infeccioso, el cáncer,
 por decir o cantar o dibujar cosas raras. Ya ves tú: una vela que habla.
 Pero ya lo decía el proverbio aquel: “Es mejor encender una vela que
 maldecir la oscuridad”. Y en esas estamos, intentando que no 
nos contagie la enfermiza oscuridad establecida.

Ah, otro día contaré cosas así en plan graciosas y tal, pero 
hoy me conformo con eso, con encender una vela y 
hablar con ella. Hasta luego.












dimecres, 11 d’agost del 2021





 





No totes les prediccions que veiem al mòbil són necessàriament veritat. 

I no totes les restriccions de mobilitat són necessàries, ni ens deixen veure la veritat.













dimarts, 10 d’agost del 2021






 


Diría que esta tira cómica es mía y diría la verdad, pero diría que es solo mía 
mentiría. Es una colaboración con Xurxo Vázquez, el guion original lo hice 
yo y el resto es todo suyo. Y diría que me causa gozo una colaboración así
 con un viñetista al que admiro desde hace años y diría la verdad, pero diría que
 la experiencia ha sido única e irrepetible y mentiría. ¿Por qué? Porque en un par
 de semanas habrá otra experiencia de colaboración creativa: él al guion y yo al
 dibujo, y eso me causa, si cabe, más gozo todavía. Sí, en los tiempos que corren
 lo de las colaboraciones entre gente que escribimos, o dibujamos, o fotografiamos, 
o etceteramos, no abundan, quizá porque cada quien solemos nadar (o naufragar)
 en el interior de nuestras cápsulas, o volar en nuestras atmósferas estancas, ya
 se sabe, las zonas de confort, o de confuerte, o de condébil… Pero, claro, es así
 como debemos vivir, como las gallinas de una granja industrial, ahí bien encerraditas 
en sus jaulitas, para que la productividad esa y el ritmo ese no pare, no. Pero ya me voy 
por los cencerros de Úbeda y no es plan, así que me voy a tomar algo, no un café
 (me gusta el olor, pero no puedo tomarlo, hace mucho que no bebo café, me
 altera los nervios), ni tampoco una cerveza (no me gusta, ya de muy jovencito,
 con las primeras salidas con amigos me pasaba, todo el mundo loco por tomar
 una cerveza y a mí ni me gustaba ni me sentaba bien), ni tampoco un vino o
 cualquier otro alcohol (nunca he sido fan del alcohol, en mis épocas de desfase 
lo que de verdad me gustaba era fumar, fumar hierbecitas de la risa y del relajo,
 pero hace años que no fumo). Así que me voy a un convento, o a una ermita,
 porque a estas alturas soy más un monje que otra cosa, y allí me tomaré un
 agua fresca y natural, y pintaré alguna mona, porque eso soy: un pintamonas, 
o un escribemonas. Y ya está, ya me he enrollado bastante y lo que quería
 decir es Gracias, Xurxo, por esta tira cómica y por la otra que vendrá 🙂















dilluns, 9 d’agost del 2021





 



El día que saqué esta foto (sí, lo sé, parece una viñeta) 
(pero es una foto) (ya si os creéis esto, os creeréis también lo 
siguiente que contaré) hacía muchísimo calor y los aparatos de 
aire acondicionado se abanicaban con gracia y salsalero (sí, salsalero)
(es un bailesito muy salao que te hará gosar, papi sabrosón) (o mami
 sabrosona) (o primo segundo, más sabrosón todavía). Y… Y… por dónde
 iba, que con el salsalero se me ha ido el cielo al santo… Eso: que los
 aires acondicionados se abanicaban y los que no se abanicaban se 
iban corriendo a echar un casquete polar ártico. La calle toda se derretía, 
y el asfalto era un chicle de fresa con tropezones de cereza en almíbar. Y los 
semáforos se doblaban y besaban las aceras, que se arqueaban y ardían
 apasionadas, abriendo las bocas de incendio y lamiendo con sus lenguas los 
pies churruscados de las pocas personas que se animaban a salir a la 
calle. Hubo alguno, incluso, que sin querer se quemó a lo bonzo 
con su propio semen incandescente, y las farolas bailaban 
sobre el horno de su propia excitación hasta llegar al punto 
de cocción en el que ya no es posible tener un orgasmo, porque 
como mínimo tenían media docena, uno detrás de otro, lamidas 
por nubes henchidas de un orgiástico calor sin final y sin vergüenza. 
Y eso sucedió aquel día que saqué esa foto, ya veis qué cosas, quién 
nos lo iba a decir: empecé hablando de un día de calor como otro
 cualquiera y acabo hablando de otras cosas que pasan, también, 
un día cualquiera. Cierto es que, como atestigua la foto, no todo el 
mundo supo ver aquel grandioso humedal erótico: hubo gente que 
insultó al sol. Mala gente aquella, la misma que en invierno disfruta 
de su calorcito, luego en verano lo repudia sin misericordia. La misma
 gente que explota a emigrantes y a pobres en general y luego, 
cuando no los necesitan, los echan a patadas. En fin, qué decir 
de ese hatajo de zopencos que demuestran su corta imaginación 
sexual yendo a un puticlub, si no valen ni la pena ni el pene ni el 
porno ni el puto prejuicio que les carcome el cerebro. Y ya está, 
ya he dicho todo lo que quería decir. Nada más por hoy :-)












dissabte, 7 d’agost del 2021





 






Diuen d'ell que sempre està en els núvols. Potser. 
I, si és així, potser per això està sempre molt a prop dels cims més 
alts de la natura més sincera, més perillosa i, també, més bonica.













dijous, 5 d’agost del 2021





 





Hay por ahí mucho animal (presuntamente racional) campando a sus anchoas.

Y no diré nada más sobre esos individuos que campan a sus anchoas, 
porque no quiero ponerme de mal humor. También podría hablar 
de la gente que campa a sus berberechos, pero no quiero 
ponerme de mal amor, así que terminaré este 
brevísimo ensayo sobre el bientrato animal 
ahuyentando a las malas pulgas 
con un gruñido liberador y
lanzando al viento un guau agradecido dedicado 
a los buenos animales que todavía, afortunadamente, 
campan a mis alrededores. Hasta luego, animalotes y animalotas.











(versión nueva de una viñeta que hice hace una década) 












dimecres, 4 d’agost del 2021





 



“Tú has sido la piedra en mi camino”, eso decía Sole Giménez cuando
 cantaba en Presuntos Implicados, y pienso que todas podemos cantar
 esa frase y evocar a alguien que fue esa gran piedra que nos regaló 
un porrazo altamente destrozador. O dos. O más.

Pero, si nos paramos un poco a observar esto, no son las enormes
 piedracas del camino las más peligrosas, quiero decir que al ser grandes
 se las ve bien, incluso podemos practicar el arte de la escalada con ellas;
 las peligrosas de veras son las piedrecicas aparentemente inofensivas,
 esas que parece que están sueltas pero que no lo están, o esas 
otras que son pequeñicas pero matonicas.

Y esto de las piedras de tamaños diferentes me lleva a esto otro: 
Los grandes personajes todopoderosos, de la política o de la economía 
o del espectáculo ese que debe continuar, están tan arriba y son tan
 famosos que ya de lejos se les ve lo poco de fiar que son, o lo crueles, 
o lo egoístas y engreídos, más que grandes piedras del camino son
 monumentos de granito y de cara muy dura plantados ahí, para que 
todo dios los vea y los adore. En cambio los jefecitos, o las jefecitas, 
los tronos pequeñitos que encontramos en nuestra vida cotidiana son
 más difíciles de detectar, y los asimilamos en nuestro quehacer 
diario, o los evitamos, o intentamos exorcizarlos con bromas, 
o silencios, o reproches en voz baja, cuando no 
nos enzarzamos a grito pelao con ellos.

Esas piedrecitas se nos meten en los zapatos, o en los calcetines o 
en los calzoncillos o en las bragas o en el suje, o se esconden debajo 
de la piel y se instalan cómodamente en nuestra cabecita, en nuestro
 corazoncito, en nuestro insomnio. Esas pueden llegar a convertirse en
 nuestro pequeño dictadorzuelo, nuestra propia canciller caprichosa 
e inflexible, nuestra peor y más resbaladiza piedra en el camino.













dilluns, 2 d’agost del 2021





 



Què és la identitat? Segurament és una construcció íntima, però potser és només 
un fantasma que de tant en tant té, com qualsevol ésser pensant, dubtes. 
potser la identitat és un guió en contínua revisió, o una disfressa, o un
 amagatall. O un policia que ja no sap qui és el bo i qui el dolent.

I parlaria ara de la persecució més llarga i famosa de la literatura, la de
 Javert, el policia recte i incorruptible, i Jean Valjean, el fugitiu curvilini 
i encara més incorruptible. Qui ha llegit "Els miserables" sap que la
 identitat oficial (o legal, o social, o inclús ritual) d'un personatge i de
 l'altre no és definitiva ni tampoc definitòria. I sí, parlaria ara de la
 novel·la de Victor Hugo, però és un llibre que vaig llegir fa 
més de trenta anys i ja em queda lluny.

Preferisc parlar de la vinyeta d'avui, que és "remake" d'una que 
vaig fer fa cinc anys. Cinc anys ja? Uf, cinc anys enrere és també un 
lloc molt llunyà, així que no parlaré de res més. Bon dia o bona nit, 
i bons o bones fantasmes vos visiten de dia o de nit.