dilluns, 21 de febrer del 2022





 



Dicen que aquel hombre que andaba cabizbajo se volvió loco, 
y dicen también que como no tenía dinero para pagar psicología 
 privada ni tenía paciencia para perderse en los laberintos de la 
psicología pública, optó por abrirse a sí mismo. Cuando dicen
eso de abrirse a sí mismo lo que quieren decir es que se 
encerró en sí mismo, pero no apareceré yo ahora en 
escena para dar detalles de su intimidad, pública 
o privada, porque esto es solo un breve 
escrito que acompaña a una breve 
viñeta, en un rincón perdido de 
la apresurada y maravillosa 
inmensidad libre donde 
(anuncian que) 
vivimos.

Así pues, este artista 
cabizmajo se va con viento 
fresco y volverá mañana o pasado 
con otra estampita divertida o reflexiva 
o cabizmaja. ¡Hasta luego!










(la viñeta es "remake" de una que saqué a pasear hace ocho años, más o menos)