Después de corretear detrás de la olla (ver post anterior) vuelvo con
dos viñetas que sobrevuelan lo que está ocurriendo en Grecia. Y no solo
en Grecia, porque lo que que está ocurriendo allí ocurre también en muchos
otros lugares donde la gran banca se cree con el derecho de pisotear
sin consideración a las pequeñas personas.
Porque sí: las personas somos pequeñas.
Pero, si queremos, podemos ser
lo más grande del mundo.
Sí sí sí.
Así pues (y así sin más) pongo de nuevo a
orbitar este planeta llamado Acapu
con mucho oxígeno y con mucho
frescorcito del bueno, porque...
¡jo, menuda olla de calor
tenemos por aquí!
((sí, olla de calor, que tiene más vapor...
...y da mucho más calor))
¡¡ Hasta pronto !!
:-)