dilluns, 28 de febrer del 2022





 



Fue hace casi 3 años cuando hice la viñeta de la duendecilla 
entonces no pensé que ella viajaría tanto de aquí 
para allá con sus preguntas aduendadas. 








Pero sí. Sí que ha viajado. Ya el año pasado se subió a 
unas cuantas tazas y rodó con alegría curiosona por caminos y 
veredas, y en estos 2 primeros meses del año, gracias a un encargo 
de Teresa (en realidad un encargo muy variado y muy múltiple), 
ha salido cabalgando a lomos de tazas y camisetas rumbo a hogares 
y escondrijos de Córdoba, Ciudad Real y también rumbo a unos 
cuantos barrios de Madrid. Incluso la duendecilla se ha dado 
el gusto de mutar en duendecillo en alguno de esos viajes.









Le agradezco a Teresa el (los) encargo(s), pues gracias a 
su iniciativa ahora me llegan ecos de la duendecilla aventurera, 
ecos que me dicen que ella está feliz en los nuevos lugares 
y con las nuevas gentes. 









Y eso es bien, claro que sí, eso anima a hacer preguntas así, 
preguntas que no se cansan de imaginar nuevas maneras de buscar. 
Y nuevas maneras de encontrar. Porque la tristeza, el dolor y el
 sufrimiento no son la respuesta definitiva. Tampoco la guerra lo es. 











Y diría más, pero no quiero interrumpir el nacimiento de tus 
propias preguntas (y respuestas) aduendadas, así pues… 
¡Hasta luego, duendecillas y duendecillos!






dissabte, 26 de febrer del 2022





 




Necessitem la teua poesia, i la meua, i la vostra i la poesia de totes 
les persones que mai han escrit cap vers. I sí, necessitem poesia de cap, 
i de cor, i de pell i de plor, poesia escrita, o recitada o cantada o 
caminada o senzillament respirada. Necessitem la poesia del veí, 
de la veïna i de l'amiga i també de l'enemic. Necessitem fer la poesia 
i no la guerra, sí, necessitem somiar somriures i fer la pau de nit i de 
dia. I fer poesia, la més nova i la més antiga, i la poesia que encara 
ningú ha fet. Sí, necessitem creure que ho podem fer, i fer 
i tornar a fer la nostra poesia.











dijous, 24 de febrer del 2022



Sí A LA PAZ



 











 





Hoy traigo la viñeta gran formato que lleva un par de semanas colgada 
en el escaparate de la peluquería RosTres de Castelló. Quizá hoy es un 
día para publicar aquí una viñeta sobre la guerra que se nos viene
 encima, o sobre la paz que nunca acaba de llegar de verdad, pero 
al final he pensado que el peloncesto es mejor. Es más deporte, 
más salud y más diver, y si aparece en pista alguien con ganas 
de violentar nuestro juego, le expulsamos y, hala, a seguir con 
lo nuestro. Y no digo más, que me tengo que ir a lanzar un 
tanque abusón desde la línea de tiro libre. ¡Hasta luego!















dimarts, 22 de febrer del 2022






 




Com són tan sincers, tan honrats i tan coherents, segur que faran això... Ai ai ai...










dilluns, 21 de febrer del 2022





 



Dicen que aquel hombre que andaba cabizbajo se volvió loco, 
y dicen también que como no tenía dinero para pagar psicología 
 privada ni tenía paciencia para perderse en los laberintos de la 
psicología pública, optó por abrirse a sí mismo. Cuando dicen
eso de abrirse a sí mismo lo que quieren decir es que se 
encerró en sí mismo, pero no apareceré yo ahora en 
escena para dar detalles de su intimidad, pública 
o privada, porque esto es solo un breve 
escrito que acompaña a una breve 
viñeta, en un rincón perdido de 
la apresurada y maravillosa 
inmensidad libre donde 
(anuncian que) 
vivimos.

Así pues, este artista 
cabizmajo se va con viento 
fresco y volverá mañana o pasado 
con otra estampita divertida o reflexiva 
o cabizmaja. ¡Hasta luego!










(la viñeta es "remake" de una que saqué a pasear hace ocho años, más o menos)















dissabte, 19 de febrer del 2022





 





Versió nova d'un fanal que vaig dibuixar fa sis anys. 
També hi ha una borratxera en la vinyeta, sí, però a mi m'agrada 
més el fanal, que és més simpàtic, més bromista i també més saludable.









divendres, 18 de febrer del 2022





 




Y después de una viñeta tan resumamente profunda y 
complicada no añadiré nada más, no vaya a ser que de tanto 
pensar nos salga humo (y algún que otro flan) por las orejas. 










dijous, 17 de febrer del 2022





 



No hay en la historia reciente del cine albinegro una pesadilla 
más horrorosa que la de Castellnou Street (¿cómo olvidar al
malvado Osuna Krueger?). La otra gran peli de terror fue 
en la historia antigua, cuando allá por 1933 el club 
desapareció y resucitó en la España zombi de 1939.











dimarts, 15 de febrer del 2022





 





Les autoritats sanitàries tenen molta autoritat i poca sanitat.











dilluns, 14 de febrer del 2022




 



“Todos los diccionarios juntos no contienen ni la mitad de los términos
 que necesitaríamos para entendernos unos a otros”.
José Saramago




El verbo enamorir no es muy académico: si preguntas por él en un
 diccionario te dirán que allí a ese verbo no lo conocen de nada. Pero
 enamorirse existe. Enamorirse es lo que hace alguien enamorado para no
 morirse del todo. Es eso, sencillamente eso. Y lo digo porque hace unos días 
un hombre sencillo nos dejó y se marchó al lugar más sencillo del universo. Él
 era un labrador amable, una persona de esas tan buenas que más que
 persona era una naranja, y flor de azahar, y reguero lleno de agua
 fresca, sí, era tres en uno: naranja y flor y agua, todo a la vez.

Dicen que Manolo se murió, que era un hombre mayor y que los 
últimos años tendía a perderse, y la cabeza se le iba a volar con 
los pájaros de la huerta, pero yo creo que él, mi vecino, lo que hizo 
fue enamorirse. Y lo hizo porque él morirse no podía, ¿cómo iba a
 separarse para siempre de Angelita, su amor de siempre? Así que él 
se enamurió. Ayer, hablando con ella, lo supe: a sus ochenta y cinco 
años Angelita siente que él está, todavía, enamorado de ella, aunque 
ya no pueda verlo, aunque ya no pueda tocarlo, aunque sus ojos claros 
se le llenen de nubes cuando habla de él, ella sabe que él sigue
 recogiendo naranjas para ella, sigue volviendo cada día de la 
tierra fértil con fruta y verduras y flores para ella, y sabe que ese 
dolor, ese dolor que le quema las entrañas, se deshace y desaparece 
en las raíces de su corazón infinitamente enamorado.

Los días pasan y las noches también y Angelita, mi vecina, una mujer 
de esas fuertes y tiernas, nacida como él directamente de la tierra recién
 labrada, continúa caminando como siempre lo ha hecho, de esa manera
 tan suya, y a mí hay algo indefinible en su caminar que me calma y me
 reconforta, porque aunque sus pasos andan muy enamoridos, ella 
sigue siendo, rodeada de su familia y acunada por su calle y por 
su barrio, una mujer sencillamente enamorada.
















(la viñeta es versión nueva de una que hice hace unos años, el texto es de hoy)




dissabte, 12 de febrer del 2022





 



La señora sentada en un banquito del parque hojea una revista. 
Ella es elegante de ropa y de gestos y su mirada pasea entre las
 páginas de un número antiguo de “Festividades”, una revista dedicada
 en exclusiva a las fiestas de la ciudad. Y decíamos que ella es elegante 
y nos sorprende ahora descubrir en su calzado una nota discordante:
 zapatillas de estar por casa ¡y calcetines de lana! Pero algo brilla en los
 ojos de la señora cuando lee “entrevista con la reina de las fiestas” y se
 ve a sí misma hecha una jovencita que posa inocente para la posteridad.
 Ella, la Reina de las Fiestas, decía cosas en la entrevista, y muchas de esas 
cosas eran invención del entrevistador, alguien del que no recuerda la cara, 
solo la voz, tan parecida a la de su padre… Él la mira desde una foto, también 
está ahí su madre. El padre y la madre, uno a cada lado de la joven 
sonriente en el salón de familia bien, administran y exportan altanería 
en cada movimiento congelado: la familia era poderosa, y la hija, 
la piedra más preciosa de la casa, era la reina.

Y la huérfana expulsada del paraíso cierra la revista y mira la foto 
a todo color de la portada, y apenas se reconoce en esos ojos confiados. 
Y las paredes de la memoria se derrumban a cámara lenta, y con las
 paredes se hunden también los cimientos y su mano busca en el móvil 
a su psicóloga pero eso también cae. El árbol que tiene detrás la agarra 
y la lanza para que vuele con las palomas con las que jugaba de niña, y
 ella besa entre las nubes aquel primer beso que nunca se repitió, y cerca
 del sol una pirámide ordena y manda. Y la angustia la acuchilla, y litros 
de lágrimas no derramadas aplastan su pecho, y su cabeza desconecta 
y la señora cae al suelo como un saco de patatas.

Alguien la alojará en alguna estadística de enfermedad mental, 
pero ella planea noche y día, desde su rincón preferido bajo los
 escombros, exiliarse a una sencilla cabaña. Y es que ella ya no 
quiere ser reina, ni tampoco sierva, aunque ninguno de los locos 
que le organizan la vida haya caído todavía en ese detalle.











dijous, 10 de febrer del 2022






 




Benvingudes i benvinguts al ball de les mascaretes revoltades. 
Ballen sense permís vostés al ritme que més els plaga. Inventen,
 imaginen, gaudisquen i obliden l'immobilisme obligatori, les multes, 
les restriccions i les pors desfasades. Ballen vostés, si els ve de gust...
 Ballen i ballen el ball de les mascaretes revoltades.







dimecres, 9 de febrer del 2022











Nuevas movilizaciones masivas en Argentina contra la deuda externa, 
contra el FMi y contra el robo continuado que sufren (y sufrimos) allí (y aquí).
 








dimarts, 8 de febrer del 2022




 




Les sucede a algunas personas, sí, que por la noche se encienden 
y por la mañana andan por las calles apagando incendios y rayos y
 truenos. Tal vez son, o somos, farolas y farolos víctimas de no muy
 cortos cortocircuitos y de no muy largas estancias en el paraíso.

Y podría ahora yo extenderme lentamente cual mancha de aceite sobre 
el asfalto de la melancolía, y hablar de los candiles y las candilejas que
 nacieron para ser lumbre y murieron en el olvido a la orilla de una
 alcantarilla cualquiera, pero mejor me vestiré de detective y me
 sumergiré en el vientre de esa alcantarilla cualquiera.

Allí hay una cucaracha insomne que se pasa toda la noche en
 movimiento, patita a patita trajinando sin parar, quizá para no ser
 vencida por el congelado aliento que habita en las entrañas del invierno.
 O quizá es que busca algo, y mientras busca toma copas llenas de mugre
 y fuma colillas vacías de luz. Siempre de aquí para allá la cucaracha, 
va y viene y sube y baja y celebra una fiesta cada vez que se 
topa con un trocito de gofre o una pizca de nata.

Solo parará, por fin, al colarse en una bolsa nevera medio abierta 
donde agoniza un cubito de hielo. El cubito la mira con sus ojos de
 húmedo cristal muy abiertos y le dice Cuéntame un chiste. Y ella, la
 cucaracha insomne, se acurruca pegadita a él y cerrando los ojos le
 susurra Yo quiero estar a tu helado hasta que se te cure el constipado
Y aquí termina la historia que escribí una mañana de invierno, 
todavía vestido con el pijama de un detective cualquiera.











diumenge, 6 de febrer del 2022






 






"Un mal instint ens inclina a creure que l'error, això tan temible 
que se'n diu l'error, és qualsevol manera de pensar distinta de 
la nostra. Heus ací per què la tolerància sol semblar, 
alhora, tan perillosa i tan difícil".

Joan Fuster










(la vinyeta és versió nova d'una que vaig ploure fa uns anys)








dissabte, 5 de febrer del 2022









Hace un par de semanas, cuando publiqué la otra viñeta de huevos,
 anuncié que pronto haría otra. Y aquí está. En la anterior ocasión
 acompañé la viñeta con un breve ensayo sobre el tema de los 
encuentros y los desencuentros y las armonías y las tocadas 
de huevos y las asambleas internas y externas. Hoy soy más breve, 
no porque no tenga huevos para decir más, o porque sea yo un gallina 
o una gallo o un lagartijo que por aquí pasaba y que ya se ha ido. No. 
Soy breve porque he quedado dentro de un rato con altas 
personalidades de la alta política y de la alta fabricación 
de armas y de la alta mamarrachez (que al final todo viene 
a ser lo mismo). Sí, he quedado con esas elegantes y sanguinarias 
bestias y tengo que preparar unas tartas muy grandes y muy llenas 
de nata para estamparlas en sus caras duras en el circo ese tan 
estúpido que tienen montado y ya va siendo hora de poner 
una coma o nos quedaremos sin respiración, bien. No sé cómo 
irá la cosa, así que si no me volvéis a ver el pelo es que morí 
en el intento. También puede ser que no llegue a superar la 
primera línea de guardaombligos, pero en todo caso me 
reiré un rato. Hala, hasta luego, que se me hace tarde…








 

dijous, 3 de febrer del 2022





 





Els pronoms febles són uns éssers que viuen en llocs escrits o parlats 
i que tenen el costum d'ajuntar-se als verbs seguint la llei del mínim
 esforç. Però, de vegades, els pronoms febles es cansen d'eixa vida 
tan fàcil i còmoda... i se'n van al gimnàs, o a caminar, o a córrer o a 
nedar o a fer l'amor apassionadament amb força i amb tendresa...










dimecres, 2 de febrer del 2022





 




Viñeta gran formato para la peluquería RosTres de Castelló.